
Seis anos depois, volto a publicar em Portugal um livro de poesia. Chave de ignição, cuja capa (construída a partir de um óleo sobre tela do pintor Nuno de Matos Duarte) se apresenta, é publicado pela Editora Labirinto, contando com um prefácio do escritor Gonçalo M. Tavares. Será lançado no próximo dia 16 de Julho, 5ª. feira, pelas 21 horas, na sala polivalente da Biblioteca Municipal de Sesimbra, sendo apresentado pelo poeta João Candeias. Honrar-me-á muito a sua presença.

Considero este quadro de Nuno de Matos Duarte uma das melhores interpretações da poesia que tenho escrito. Será, dentro de três ou quatro semanas, o centro da capa do meu próximo livro de poemas, intitulado Chave de Ignição.
JULIÁN RODRÍGUEZ
(http://www.editoraregextremadura.com/main.htm)
El lugar, la imagen
de Ruy Ventura
El libro de poemas de Ruy Ventura El lugar, la imagen, pertenece a la serie “Letras portuguesas”, en la que la Editora Regional de Extremadura irá presentando algunas de las voces fundamentales de la última literatura del país vecino: poesía, narrativa, ensayo...
Esta edición, bilingüe, cuenta con una traducción al castellano de Antonio Sáez Delgado (Cáceres, 1970), poeta, ensayista y prestigioso traductor y profesor de la Universidad de Évora.
Una cita de Bernardo Soares, heterónimo de Pessoa y “autor” del Libro del desasosiego, abre este libro: “Lo que vemos no es lo que vemos, sino lo que somos”. Y en torno a estas palabras se articula el poemario de Ruy Ventura, uno de los nombres más interesantes de la nueva poesía portuguesa: la imagen, parece decirnos, también puede ser “interior”, es decir, no construida con la mirada sino con las vivencias, con los lugares visitados, vividos, siempre con una carga de pasado, de atemporalidad, y, casi, de sacralidad: un fuerte (el de Portinho da Arrábida, el de Aveyron...), una iglesia (la de Portalegre), un castillo (el de Sesimbra, el de Carreiras, el de Valencia de Alcántara...), una torre (la de las Jerónimas, en Trujillo)... Y no sólo lugares: también objetos, objetos “contemplados” (una escultura antigua, una talla de madera...)
Los paisajes -los lugares- son proyectados en la escritura con un distanciamiento y una dicción (siempre esa combinación: las formas populares y la vanguardia, digamos, tradicional) que los hace más verdaderos y duraderos: la emoción siempre contenida, y las palabras siempre en voz baja. La huella que deja esta poesía tiene que ver tanto con lo dicho como con lo no dicho. Sirvan como ejemplo unos versos del poema “regreso”, que nacieron, como señala Ventura en una nota al pie, al contemplar una escultura del legendario rey portugués Don Sebastián, un verdadero mito, más sentimental que heroico, en su país: “dejaste en la piedra / tu mirada sin sombra / para soportar mejor / el peso de los hombros, / recuperando la ceniza / que quedó sobre el océano”. Y una estela funeraria romana hallada en Mérida provoca estos otros, del poema “memoria”: “oigo mal el sonido del laúd en tu casa. / no puedo ver la paloma / que vuela sobre la ceniza, / en el sepulcro de la ruina y de este alma. / he exhumado con los ojos / el mosaico que rodeaba, quizá, a ese corazón / –sumergido en el agua y la melodía. // siglos después, encuentro ese rostro / tan pronto escondido. / dibujado en el mármol. / como en una fotografía. / esa sonrisa excavando la penumbra de la nave // la iluminación de las lágrimas / en el interior del cristal”.
*
O livro de poemas de Ruy Ventura, O lugar, a imagem, pertence à colecção “Letras Portuguesas”, na qual a Editora Regional da Extremadura irá apresentando algumas das vozes fundamentais da mais recente literatura portuguesa: poesia, narrativa, ensaio... Esta edição, bilingue, conta com uma tradução para o castelhano de Antonio Sáez Delgado (Cáceres, 1970), poeta, ensaísta e prestigiado tradutor e professor da Universidade de Évora.Uma citação de Bernardo Soares, heterónimo de Pessoa e “autor” do Livro do Desassossego, abre este livro: “O que vemos, não é o que vemos, senão o que somos”. Em volta destas palavras se articula o poemário de Ruy Ventura, um dos nomes mais interessantes da nova poesia portuguesa. A imagem, parece dizer-nos, também pode ser “interior”, isto é, não construída com o olhar mas com as vivências, com os lugares visitados, vividos, sempre com uma carga de passado, de atemporalidade e, quase, de sacralidade. Uma fortaleza (a do Portinho da Arrábida, ou a de Aveyron), uma igreja (a de Portalegre), um castelo (o de Sesimbra, o das Carreiras, o de Valencia de Alcántara...), uma torre (a das Jerónimas, em Trujillo)... E não apenas lugares: também objectos, objectos “contemplados” (uma escultura antiga, uma talha de madeira...).
As paisagens – os lugares – são projectados na escrita com um distanciamento e uma dicção (sempre essa combinação: as formas populares e a vanguarda, digamos, tradicional) que as faz mais verdadeiras e duradouras: a emoção sempre contida e as palavras sempre ditas em voz baixa. A marca que deixa esta poesia tem que ver tanto com o dito como com o não dito. Sirvam como exemplo alguns versos do poema “regresso”, que nasceram, como assinala Ventura numa nota de rodapé, ao contemplar uma escultura do lendário rei português Dom Sebastião, um verdadeiro mito, mais sentimental do que heróico, no seu país:
“depositaste na pedra / o teu olhar sem sombra / para melhor suportares / o peso desses ombros, / recuperando a cinza / que ficou sobre o oceano.” (p. 30)
E uma estela funerária romana encontrada em Mérida provoca estes outros, saídos do poema “memória”:
“mal oiço o som do alaúde em tua casa. / não consigo ver a pomba / voando sobre a cinza, / no sepulcro da ruína e desta alma. / exumei com os olhos / o mosaico que rodeava, talvez, esse coração – / mergulhado na água e na melodia. / séculos depois, encontro esse rosto / tão cedo escondido. / desenhado no mármore. / como numa fotografia. / esse sorriso escavando a penumbra da nave – / a iluminação das lágrimas / no interior do vidro.” (p. 28)
Tradução de Duarte Correia, a partir da página da Editora Regional da Extremadura. Julián Rodríguez, escritor espanhol (Ceclavín, 1968), é o autor do design gráfico e da capa deste livro de RV.
(http://www.editoraregextremadura.com/main.htm)
El lugar, la imagen
de Ruy Ventura
El libro de poemas de Ruy Ventura El lugar, la imagen, pertenece a la serie “Letras portuguesas”, en la que la Editora Regional de Extremadura irá presentando algunas de las voces fundamentales de la última literatura del país vecino: poesía, narrativa, ensayo...
Esta edición, bilingüe, cuenta con una traducción al castellano de Antonio Sáez Delgado (Cáceres, 1970), poeta, ensayista y prestigioso traductor y profesor de la Universidad de Évora.
Una cita de Bernardo Soares, heterónimo de Pessoa y “autor” del Libro del desasosiego, abre este libro: “Lo que vemos no es lo que vemos, sino lo que somos”. Y en torno a estas palabras se articula el poemario de Ruy Ventura, uno de los nombres más interesantes de la nueva poesía portuguesa: la imagen, parece decirnos, también puede ser “interior”, es decir, no construida con la mirada sino con las vivencias, con los lugares visitados, vividos, siempre con una carga de pasado, de atemporalidad, y, casi, de sacralidad: un fuerte (el de Portinho da Arrábida, el de Aveyron...), una iglesia (la de Portalegre), un castillo (el de Sesimbra, el de Carreiras, el de Valencia de Alcántara...), una torre (la de las Jerónimas, en Trujillo)... Y no sólo lugares: también objetos, objetos “contemplados” (una escultura antigua, una talla de madera...)
Los paisajes -los lugares- son proyectados en la escritura con un distanciamiento y una dicción (siempre esa combinación: las formas populares y la vanguardia, digamos, tradicional) que los hace más verdaderos y duraderos: la emoción siempre contenida, y las palabras siempre en voz baja. La huella que deja esta poesía tiene que ver tanto con lo dicho como con lo no dicho. Sirvan como ejemplo unos versos del poema “regreso”, que nacieron, como señala Ventura en una nota al pie, al contemplar una escultura del legendario rey portugués Don Sebastián, un verdadero mito, más sentimental que heroico, en su país: “dejaste en la piedra / tu mirada sin sombra / para soportar mejor / el peso de los hombros, / recuperando la ceniza / que quedó sobre el océano”. Y una estela funeraria romana hallada en Mérida provoca estos otros, del poema “memoria”: “oigo mal el sonido del laúd en tu casa. / no puedo ver la paloma / que vuela sobre la ceniza, / en el sepulcro de la ruina y de este alma. / he exhumado con los ojos / el mosaico que rodeaba, quizá, a ese corazón / –sumergido en el agua y la melodía. // siglos después, encuentro ese rostro / tan pronto escondido. / dibujado en el mármol. / como en una fotografía. / esa sonrisa excavando la penumbra de la nave // la iluminación de las lágrimas / en el interior del cristal”.
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O livro de poemas de Ruy Ventura, O lugar, a imagem, pertence à colecção “Letras Portuguesas”, na qual a Editora Regional da Extremadura irá apresentando algumas das vozes fundamentais da mais recente literatura portuguesa: poesia, narrativa, ensaio... Esta edição, bilingue, conta com uma tradução para o castelhano de Antonio Sáez Delgado (Cáceres, 1970), poeta, ensaísta e prestigiado tradutor e professor da Universidade de Évora.Uma citação de Bernardo Soares, heterónimo de Pessoa e “autor” do Livro do Desassossego, abre este livro: “O que vemos, não é o que vemos, senão o que somos”. Em volta destas palavras se articula o poemário de Ruy Ventura, um dos nomes mais interessantes da nova poesia portuguesa. A imagem, parece dizer-nos, também pode ser “interior”, isto é, não construída com o olhar mas com as vivências, com os lugares visitados, vividos, sempre com uma carga de passado, de atemporalidade e, quase, de sacralidade. Uma fortaleza (a do Portinho da Arrábida, ou a de Aveyron), uma igreja (a de Portalegre), um castelo (o de Sesimbra, o das Carreiras, o de Valencia de Alcántara...), uma torre (a das Jerónimas, em Trujillo)... E não apenas lugares: também objectos, objectos “contemplados” (uma escultura antiga, uma talha de madeira...).
As paisagens – os lugares – são projectados na escrita com um distanciamento e uma dicção (sempre essa combinação: as formas populares e a vanguarda, digamos, tradicional) que as faz mais verdadeiras e duradouras: a emoção sempre contida e as palavras sempre ditas em voz baixa. A marca que deixa esta poesia tem que ver tanto com o dito como com o não dito. Sirvam como exemplo alguns versos do poema “regresso”, que nasceram, como assinala Ventura numa nota de rodapé, ao contemplar uma escultura do lendário rei português Dom Sebastião, um verdadeiro mito, mais sentimental do que heróico, no seu país:
“depositaste na pedra / o teu olhar sem sombra / para melhor suportares / o peso desses ombros, / recuperando a cinza / que ficou sobre o oceano.” (p. 30)
E uma estela funerária romana encontrada em Mérida provoca estes outros, saídos do poema “memória”:
“mal oiço o som do alaúde em tua casa. / não consigo ver a pomba / voando sobre a cinza, / no sepulcro da ruína e desta alma. / exumei com os olhos / o mosaico que rodeava, talvez, esse coração – / mergulhado na água e na melodia. / séculos depois, encontro esse rosto / tão cedo escondido. / desenhado no mármore. / como numa fotografia. / esse sorriso escavando a penumbra da nave – / a iluminação das lágrimas / no interior do vidro.” (p. 28)
Tradução de Duarte Correia, a partir da página da Editora Regional da Extremadura. Julián Rodríguez, escritor espanhol (Ceclavín, 1968), é o autor do design gráfico e da capa deste livro de RV.
José María Cumbreño
Ruy Ventura acaba de publicar en Estados Unidos (con el título How to leave a house) su poemario Assim se deixa uma casa. De la traducción se ha encargado Briang Strang.
Me alegro sinceramente de que la obra de Ruy comience a divulgarse como se merece. Él es un poeta de una sensibilidad y un talento fuera de lo común. Nosotros, dentro de unos meses (por desgracia, más de los que me gustaría), tendremos la fortuna de publicar la versión española del poemario que en Portugal le sacará la prestigiosa editorial Cosmorama.
La relación de Ruy con Extremadura viene de hace tiempo. De hecho, los lectores que quieran acercarse a su obra en español deberán hacerlo a través de editoriales extremeñas: la Editora Regional de Extremadura (El lugar, la imagen), los Cuadernos Porticus (Un poco más sobre la ciudad) y, en un futuro, Littera Libros (Chave de igniçao).Ojalá Cáceres y Badajoz terminasen siendo dos provincias del Alentejo.
Publicado aqui.
Ruy Ventura acaba de publicar en Estados Unidos (con el título How to leave a house) su poemario Assim se deixa uma casa. De la traducción se ha encargado Briang Strang.
Me alegro sinceramente de que la obra de Ruy comience a divulgarse como se merece. Él es un poeta de una sensibilidad y un talento fuera de lo común. Nosotros, dentro de unos meses (por desgracia, más de los que me gustaría), tendremos la fortuna de publicar la versión española del poemario que en Portugal le sacará la prestigiosa editorial Cosmorama.
La relación de Ruy con Extremadura viene de hace tiempo. De hecho, los lectores que quieran acercarse a su obra en español deberán hacerlo a través de editoriales extremeñas: la Editora Regional de Extremadura (El lugar, la imagen), los Cuadernos Porticus (Un poco más sobre la ciudad) y, en un futuro, Littera Libros (Chave de igniçao).Ojalá Cáceres y Badajoz terminasen siendo dos provincias del Alentejo.
Publicado aqui.

António Sáez Delgado
La Casa de la Poesía
Prólogo a Assim se deixa uma casa
Alma Azul, Coimbra, 2003
En Así se deja una casa se transparentan los motivos esenciales de la poesía de Ruy Ventura, que son, también, los de la mejor poesia cuando es indagación y trascendencia, cuando es búsqueda constante más que respuesta definitiva, cuando se alza, en suma, como una revelación que nos eleva por encima de la vida cotidiana, esto es, que se limita a ayudarnos a comprenderla. Porque en los poemas de Ruy Ventura (a mi parecer, una de las voces más interesantes de la última poesía portuguesa) asoma, en médio de un universo simbólico plenamente propio, un pulso poético que se alimenta de la cultura y de la vida en un afán por comprender el mundo, por aspirar a explicarnos ese enorme silencio que nos rodea.
La memoria, la casa, la luz pueblan estos poemas que son también un intento por tornar habitable el território de la existencia, en toda su pluralidad, en toda su enigmática e inexplicable pluralidad. Los versos viajan a través de lo oscuro buscando una luz donde asirse, una luz que encuentran la mayor parte de las veces en objetos cotidianos, en las calles de una ciudad, en la respiración de un cuerpo que arde como el tiempo en nuestras manos. A la trascendencia de las grandes preguntas opone el poeta las palabras pequeñas que responden, en voz baja y susurrante, a los grandes enigmas de esa vida que es, también, viaje hacia ninguna parte. El hombre descubre el valor de la palabra y se funde con la naturaleza como forma de echar raíces en un mundo extraño y, hasta cierto punto, desconocido, en el que la mirada, las manos, la escritura son otras formas de decir la vida, la casa, el tiempo.
La poesía de Ruy Ventura, disfarzada de cotidiano en ocasiones, culta y trascendente desde la propia exigência de su aliento, habita también el terreno de la emoción, se abre paso balbuceante entre los objetos y los sentimientos que construyen el mundo que nos toca habitar. Un mundo en el que no nos está permitido cambiar de casa, porque por mucho que la abandonemos siempre regresamos, al final, al centro de nosotros mismos, a las pocas certezas que constituyen nuestro sueño más profundo. Así se deja una casa nos habla de las diferentes formas de la naturaleza como refugio del deterioro del tiempo, de las paredes y las murallas con que construímos nuestro mundo para abrigarnos de las nieblas más densas, de las carreteras y las calles que llegan y abandonan las ciudades que nos conducen a nosotros mismos.
Nosotros mismos: el único final posible para un buen livro de poemas.
Um poema de
SETE CAPÍTULOS DO MUNDO
(trad. para castelhano de Marta López Vilar)
19
de nuevo pienso en el mar.
la cicatriz no llega a existir.
la brisa dibuja tan sólo una voz:
el sueño.
el dolor permanece
en la herida y en la imagen.
¿cargaré también el peso?
la noche continua:
demasiado larga.
19
de novo penso no mar.
a cicatriz não chega a existir.
a brisa desenha apenas uma voz
- o sono.
a dor permanece
na ferida e na imagem.
carregarei também o peso?
a noite continua
- demasiado longa.
Publicado por Marta López Vilar no seu blogue Laberinto de Papel.
SETE CAPÍTULOS DO MUNDO
(trad. para castelhano de Marta López Vilar)
19
de nuevo pienso en el mar.
la cicatriz no llega a existir.
la brisa dibuja tan sólo una voz:
el sueño.
el dolor permanece
en la herida y en la imagen.
¿cargaré también el peso?
la noche continua:
demasiado larga.
19
de novo penso no mar.
a cicatriz não chega a existir.
a brisa desenha apenas uma voz
- o sono.
a dor permanece
na ferida e na imagem.
carregarei também o peso?
a noite continua
- demasiado longa.
Publicado por Marta López Vilar no seu blogue Laberinto de Papel.
Nicolau Saião
(no jornal caboverdiano O Liberal, 3/11/2005)
FIGURAS PORTALEGRENSES – RUY VENTURA
[...]
No princípio dos anos 90 – era eu funcionário na Biblioteca Municipal de Portalegre – , certa manhã fui procurado por um jovem dos seus 18 anos que a breve trecho da conversa percebi não ser pessoa vulgar. Vinha informar-se sobre etnografia da região e, pouco depois, a conversa orientou-se para os lados da poesia. Palavra puxou palavra e a dado passo, algo timidamente, o meu interlocutor disse-me que também fazia versos e que, interessado nas artes, até já vira quadros meus numa exposição havida pouco tempo atrás na galeria local.
Lá tratámos dos assuntos que o ocupavam e, passados uns dias, trouxe-me um caderninho com poemas escritos à mão que considerei atentamente.
Estebelecera-se um contacto que persistiu através dos anos e se cimentou depois de eu ter tomado conta da função de responsável directo no Centro de Estudos José Régio.
Estudante de excepção – trabalhador e muito informado, faria a seguir uma licenciatura e um mestrado em estudos literários – Ruy Ventura (nas.1973) continuou a escrever poemas que, em 1997, mereceram o Prémio Revelação/Poesia da Associação Portuguesa de Escritores pelo seu livro “Arquitectura do Silêncio”.
Hoje, o meu amigo e confrade é uma das vozes representativas da novíssima poesia portuguesa. Tal tem sido reconhecido por personalidades tão diferentes como Agostinho da Silva, J.O.Travanca-Rego, Amadeu Carvalho Homem, Marcelo Rebelo de Sousa ou, no estrangeiro, Antonio Sáez Delgado, Floriano Martins ou Gérard Calandre. Autor de outros livros de poemas, de traduções e de ensaios, RV é um companheiro esclarecido, talentoso e vertical – um homem de antes quebrar que torcer, como se diz em português vernáculo.
Foi ele que escreveu o texto que vai a seguir, celebrando nostalgicamente a sua vila de Carreiras – e assim inicio como prometera a cíclica apresentação de figuras notáveis da minha região alentejana.
“As ruas das Carreiras onde eu nasci (após ter visto a luz em Portalegre e sangue novo em Lisboa) já não existem. São outros os nomes, outras as pedras – que teimam em não deixar esquecer a calçada antiga -, outras as casas. Só o horizonte não mudou ainda: a mesma serra, o mesmo azul longínquo, os mesmos sobreiros rompendo por entre as lajes, a escola, rompendo a folhagem das acácias e das amoreiras.
Entre o número oito da rua da Fonte Nova e o número cinco da Calçadinha, pouco resta de há vinte e cinco anos.
A fonte perdeu alguns dos seus azulejos e deixou de ter malvariscos pelo São João.
A dona Maria José já não se preocupa com as suas dálias, algures entre as minhas duas tangerineiras. O ti’ João Narciso já não abre a sua meia-porta vermelha, nem a ti’ Bernarda fica comigo na altura das azeitonas.
O barro desapareceu hoje dos caminhos (assim como os escaravelhos, e os burros escorregando até em frente às ruínas da Casa da Carreirinha).
Do Chão da Amoreira, como eu ainda o conheci, ficou apenas uma nesga de terra apertada entre duas casas. Os castanheiros, os abrunheiros, o muro (quase segurando a oliveira), situam-se no mesmo lugar que hoje ocupa a casa da avó - amarela, com barras brancas, um botaréu cheio de craveiros, uma roseira fazendo esquina frente ao canto do lume, do outro lado da rua, entre as flores dos rapazinhos e a parede de pedra solta, há muito tempo esbarrondada.
O Ribeirinho é hoje só nome de rua. Já ninguém lava nas suas águas, empresadas junto de uma figueira velha. Desapareceu sob o alcatrão e a sarrisca, para dar lugar a uma estrada larga. Continuo, no entanto, a regressar a este espaço, como se regressasse chamado pela voz dos sinos, que tanto embalam os mortos quanto repicam carreirense novo ou hora de procissão. O automóvel (como há uns anos a camioneta) continua a dar a mesma volta, trezentos e sessenta graus em torno da distância, feita entre algum riso e toda a melancolia”.
(no jornal caboverdiano O Liberal, 3/11/2005)
FIGURAS PORTALEGRENSES – RUY VENTURA
[...]
No princípio dos anos 90 – era eu funcionário na Biblioteca Municipal de Portalegre – , certa manhã fui procurado por um jovem dos seus 18 anos que a breve trecho da conversa percebi não ser pessoa vulgar. Vinha informar-se sobre etnografia da região e, pouco depois, a conversa orientou-se para os lados da poesia. Palavra puxou palavra e a dado passo, algo timidamente, o meu interlocutor disse-me que também fazia versos e que, interessado nas artes, até já vira quadros meus numa exposição havida pouco tempo atrás na galeria local.
Lá tratámos dos assuntos que o ocupavam e, passados uns dias, trouxe-me um caderninho com poemas escritos à mão que considerei atentamente.
Estebelecera-se um contacto que persistiu através dos anos e se cimentou depois de eu ter tomado conta da função de responsável directo no Centro de Estudos José Régio.
Estudante de excepção – trabalhador e muito informado, faria a seguir uma licenciatura e um mestrado em estudos literários – Ruy Ventura (nas.1973) continuou a escrever poemas que, em 1997, mereceram o Prémio Revelação/Poesia da Associação Portuguesa de Escritores pelo seu livro “Arquitectura do Silêncio”.
Hoje, o meu amigo e confrade é uma das vozes representativas da novíssima poesia portuguesa. Tal tem sido reconhecido por personalidades tão diferentes como Agostinho da Silva, J.O.Travanca-Rego, Amadeu Carvalho Homem, Marcelo Rebelo de Sousa ou, no estrangeiro, Antonio Sáez Delgado, Floriano Martins ou Gérard Calandre. Autor de outros livros de poemas, de traduções e de ensaios, RV é um companheiro esclarecido, talentoso e vertical – um homem de antes quebrar que torcer, como se diz em português vernáculo.
Foi ele que escreveu o texto que vai a seguir, celebrando nostalgicamente a sua vila de Carreiras – e assim inicio como prometera a cíclica apresentação de figuras notáveis da minha região alentejana.
“As ruas das Carreiras onde eu nasci (após ter visto a luz em Portalegre e sangue novo em Lisboa) já não existem. São outros os nomes, outras as pedras – que teimam em não deixar esquecer a calçada antiga -, outras as casas. Só o horizonte não mudou ainda: a mesma serra, o mesmo azul longínquo, os mesmos sobreiros rompendo por entre as lajes, a escola, rompendo a folhagem das acácias e das amoreiras.
Entre o número oito da rua da Fonte Nova e o número cinco da Calçadinha, pouco resta de há vinte e cinco anos.
A fonte perdeu alguns dos seus azulejos e deixou de ter malvariscos pelo São João.
A dona Maria José já não se preocupa com as suas dálias, algures entre as minhas duas tangerineiras. O ti’ João Narciso já não abre a sua meia-porta vermelha, nem a ti’ Bernarda fica comigo na altura das azeitonas.
O barro desapareceu hoje dos caminhos (assim como os escaravelhos, e os burros escorregando até em frente às ruínas da Casa da Carreirinha).
Do Chão da Amoreira, como eu ainda o conheci, ficou apenas uma nesga de terra apertada entre duas casas. Os castanheiros, os abrunheiros, o muro (quase segurando a oliveira), situam-se no mesmo lugar que hoje ocupa a casa da avó - amarela, com barras brancas, um botaréu cheio de craveiros, uma roseira fazendo esquina frente ao canto do lume, do outro lado da rua, entre as flores dos rapazinhos e a parede de pedra solta, há muito tempo esbarrondada.
O Ribeirinho é hoje só nome de rua. Já ninguém lava nas suas águas, empresadas junto de uma figueira velha. Desapareceu sob o alcatrão e a sarrisca, para dar lugar a uma estrada larga. Continuo, no entanto, a regressar a este espaço, como se regressasse chamado pela voz dos sinos, que tanto embalam os mortos quanto repicam carreirense novo ou hora de procissão. O automóvel (como há uns anos a camioneta) continua a dar a mesma volta, trezentos e sessenta graus em torno da distância, feita entre algum riso e toda a melancolia”.
ao diário espanhol Hoy. Conduzida por Antonio Sáez Delgado.
“A Extremadura tem sabido desenvolver uma estratégia inteligente de diálogo com Portugal” - afirma Ruy Ventura, que gostaria de continuar divulgando o que escreve entre os leitores espanhóis
RUY VENTURA nasceu em 1973 em Portalegre, no Alto Alentejo. Actualmente concilia a escrita com o seu trabalho como professor numa escola de Sesimbra. Publicou vários livros de poesia, o primeiro dos quais recebeu o Prémio Revelação da Associação Portuguesa de Escritores. Deu à estampa diversos artigos sobre poesia contemporânea, literatura tradicional e toponímia, assim como traduções de vários escritores espanhóis. O seu último livro de poemas foi traduzido e publicado pela Editora Regional da Extremadura: “El lugar, la imagen”.
Que significa para si a Espanha?
Com o andar do tempo, "Espanha" é para mim cada vez mais um sinónimo de "Hispania" ou de "Ibéria" e cada vez menos o nome de uma entidade política. Apesar da diversidade cultural e linguística existente nesta "mão da Europa" (como afirmava Miguel de Unamuno), cujo valor inalienável todos devemos reconhecer e cultivar, penso que só temos a ganhar com o fomento de um diálogo incessante entre nações. "Espanha", para mim, nunca será olhada como o "Outro", mas sempre como a outra face de uma identidade peninsular poliédrica. Os estados nascem e morrem, conforme sopram os ventos políticos, militares ou económicos (e os múltiplos interesses, em tantas ocasiões sinistros, que os impulsionam). As culturas e as línguas submetem-se à lei de Lavoisier: nada se perde ou cria, tudo se transforma.
Que aspectos positivos e negativos recorda do seu contacto com Espanha?
RUY VENTURA nasceu em 1973 em Portalegre, no Alto Alentejo. Actualmente concilia a escrita com o seu trabalho como professor numa escola de Sesimbra. Publicou vários livros de poesia, o primeiro dos quais recebeu o Prémio Revelação da Associação Portuguesa de Escritores. Deu à estampa diversos artigos sobre poesia contemporânea, literatura tradicional e toponímia, assim como traduções de vários escritores espanhóis. O seu último livro de poemas foi traduzido e publicado pela Editora Regional da Extremadura: “El lugar, la imagen”.
Que significa para si a Espanha?
Com o andar do tempo, "Espanha" é para mim cada vez mais um sinónimo de "Hispania" ou de "Ibéria" e cada vez menos o nome de uma entidade política. Apesar da diversidade cultural e linguística existente nesta "mão da Europa" (como afirmava Miguel de Unamuno), cujo valor inalienável todos devemos reconhecer e cultivar, penso que só temos a ganhar com o fomento de um diálogo incessante entre nações. "Espanha", para mim, nunca será olhada como o "Outro", mas sempre como a outra face de uma identidade peninsular poliédrica. Os estados nascem e morrem, conforme sopram os ventos políticos, militares ou económicos (e os múltiplos interesses, em tantas ocasiões sinistros, que os impulsionam). As culturas e as línguas submetem-se à lei de Lavoisier: nada se perde ou cria, tudo se transforma.
Que aspectos positivos e negativos recorda do seu contacto com Espanha?
Não registo na minha memória qualquer experiência negativa ocorrida dentro das fronteiras de Espanha. Tenho sido sempre bem acolhido, com um carinho que me tem cativado. Se calhar tenho tido sorte... Gente boa e má existe em todo lado. Na minha memória ancestral (sendo eu neto de contrabandistas), guardo em segunda ou terceira mão as histórias de fugas e de prisões feitas pelos “carabineros”... ou o registo de mortes ocorridas durante as guerras de outros séculos, não esquecendo as narrativas da guerra civil, essa luta "entre maus e maus", para citar novamente o autor de "Por Tierras de Portugal y de España"... Mas nada posso guardar, até ao momento, algo que configure realmente uma memória negativa. Como momentos positivos posso lembrar os primeiros encontros com alguns poetas que hoje conto entre os meus amigos e as primeiras visitas a espaços tão marcantes quanto Yuste, o Pórtico da Glória compostelano, o gótico de Guadalupe ou essa "catedral paúlica" de Barcelona, a Sagrada Família.
Na opinião, qual deve ser o papel da Extremadura como região fronteiriça?
A Extremadura tem sabido desenvolver uma estratégia inteligente de diálogo com Portugal. Sem abdicar das suas idiossincrasias, tem sabido crescer abraçando os seus irmãos do outro lado do Guadiana e do Tejo. Será, penso, o melhor elo, no futuro, para o estabelecimento de uma Comunidade de Povos de Línguas Ibéricas, como desejava Agostinho da Silva, cativando ao mesmo tempo o seu governo central e os de alguns países da América Latina.
Quais são os seus principais projectos e reptos futuros na sua relação com Espanha?
Os meus dois livros mais recentes, "Um pouco mais sobre a cidade" e "O lugar, a imagem", foram já publicados em Espanha, em editoras extremenhas. Desejo continuar esta divulgação de quanto escrevo entre os leitores que falam o castelhano. Gostaria, por exemplo, de publicar aí uma antologia pessoal da minha poesia... Para além disto, tenho todo o interesse em continuar a colaborar com a imprensa cultural, como neste momento acontece com a revista "La imagén de Extremadura".
[Entrevista publicada do diário “Hoy”, de 5 de Abril de 2008. O original está disponível em http://www.hoy.es/20080405/sociedad/extremadura-sabido-desarrollar-estrategia-20080405.html ]
[Entrevista publicada do diário “Hoy”, de 5 de Abril de 2008. O original está disponível em http://www.hoy.es/20080405/sociedad/extremadura-sabido-desarrollar-estrategia-20080405.html ]

Reportagem sobre a sessão de homenagem a Sebastião da Gama, onde usaram da palavra Joana Luísa da Gama (viúva do poeta), Nicolau da Claudina e Ruy Ventura (in O Setubalense, de 11.4.2008).
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